¿Se fueron los loros del Balneario El Cóndor?

Texto: Mauricio Failla y Veronica Seijas Pasamos otro verano en el Balneario El Cóndor con un enero repleto de pichones y volantones de loros barranqueros, esos loritos de pico blanco que tanto llaman la atención a los veraneantes que nos visitan. Y, de repente y sin precio aviso, en febrero el silencio se hizo escuchar: este año nuestros loros decidieron migrar masivamente. Las playas y acantilados quedaron en silencio. Incluso las calles del balneario, donde duermen y parlotean literalmente miles de loros cada noche, sonaban distinto. ¡Casi no vimos loros en todo febrero! Es como venir al mar y no escuchar en semanas una sola ola golpear la playa. Este fenómeno, que estamos estudiando pero aún no logramos comprender del todo, es realmente llamativo y nos llena de preguntas: ¿Por qué algunos años los loros migran y otros no? ¿A dónde van? Aunque aún no lo sabemos totalmente, hay algunas posibles explicaciones que continuaremos investigando. Como lo hacen muchos anim...