¿Por qué no se detectaron loros barranqueros con gripe aviar?
En agosto del año 2023, la Secretaría de Ambiente y Cambio Climático de la provincia de Río Negro, y el Municipio de Viedma detectaron la aparición de lobos marinos muertos o con síntomas compatibles con gripe aviar. ¿Podría esto afectar a los loros barranqueros de la colonia de El Cóndor?
Texto Juan F.
Masello y Alejandro Balbiano.
La gripe o influenza aviar es una enfermedad de las aves de corral
causada por distintas cepas del virus de la gripe tipo A, y que pueden infectar
a varias especies de aves. Las aves de criadero pueden ser infectadas por dos
cepas de virus de la gripe aviar.
- Los virus
altamente patógenos, que se propagan rápidamente y pueden matar a casi
todo un plantel de aves en un lapso de 48 horas.
- Los virus poco patógenos, que causan solo síntomas leves en las aves, como, por ejemplo, disminución en la producción de huevos.
Estos virus de la gripe aviar no suelen afectar a los seres humanos, sin embargo, se ha detectado la enfermedad en trabajadores de la industria avícola. Por esta causa, se considera a la influenza aviar como una enfermedad potencialmente zoonótica, lo que significa que puede transmitirse de animales a humanos.
El virus altamente patógeno o H5N1 se excreta por materia fecal, saliva
y secreciones nasales de las aves infectadas, y se cree que entra al cuerpo de
otros animales, como los lobos y aves marinas, a través de la boca, la nariz,
los ojos y los pulmones.
De lobos, aves marinas, loros y gripe aviar
El mayor número de lobos marinos muertos o infectados se detectó en las playas ubicadas entre el Balneario El Cóndor y el Área Natural Protegida Punta Bermeja, en Río Negro. También se encontraron aves muertas, principalmente gaviotas y pingüinos. Pero llamativamente no se detectaron, hasta ahora, loros barranqueros enfermos o muertos, incluso en playas donde encontramos lobos marinos fallecidos junto a los acantilados, y donde los loros, en esta época del año, se reproducen y crían a sus pichones.
Una explicación posible, es que los loros podrían tener cierto grado de protección gracias a lo que comen.
En el año 2018, los investigadores publicaron un trabajo científico donde se demuestra que algunos de los alimentos que los loros consumen regularmente actúan como remedios.
El Monte es el hábitat natural del loro barranquero y donde encuentra sus alimentos, que consisten en frutos, bayas, brotes y semillas. Actualmente, los investigadores han descubierto que algunos de esos alimentos actúan, además, como medicamentos antiparasitarios y con propiedades antimicrobianas. El Monte se convierte así en supermercado y farmacia de los loros.
Así, por ejemplo, el consumo de ciertas plantas como el
chañar (Geoffroea decorticans), el
caldén (Prosopis caldenia), el molle
blanco (Schinus johnstonii), la
murtilla (Empetrum rubrum), el
yao-yin (Lycium chilense), o el cardo
(Carduus thoermeri) entre otros
muchos, podrían mejorar o hacer más fuerte el sistema inmunológico o las
defensas de los loros barranqueros para que los protejan de ciertas
enfermedades.
Cuidado, loros como mascotas
Los parásitos sanguíneos parecen ser comunes entre los
loros cautivos, especialmente en casas y zoológicos. En cambio, los loros
silvestres, en general, carecen de ellos. Una explicación posible para esta
diferencia es que el estrés asociado con el cautiverio puede bajar las defensas
de los individuos o reducir su capacidad para evitar los vectores comúnmente
presentes en hogares y zoológicos, lo que aumenta la carga de parásitos. Por
otro lado, muchos loros en la naturaleza se alimentan de frutas, semillas o
brotes de flores, con propiedades antiparasíticas y antimicrobianas, mientras
que en cautiverio reciben alimentos que no contienen esas metabolitos antiparasitarios.
Una buena razón para no tener loros como mascotas.
Recomendaciones
Aprovechamos este post para sugerir una serie de recomendaciones que podrían ayudar a proteger la salud pública de turistas y pobladores locales que visitan estas hermosas playas de la Patagonia:
1) Restricción de acceso a playas. No ingresar a las áreas de playa afectadas. Evitar la exposición en estas zonas contribuye significativamente a disminuir el riesgo de contagio.
2) Control de mascotas. Se recomienda no llevar mascotas a las playas. El contacto de los animales domésticos con el virus es altamente peligroso y puede facilitar su propagación.
3) Distancia de lobos marinos y aves muertas. Se aconseja mantener distancia y evitar el contacto directo, en caso de encontrar lobos marinos o aves muertas. Esto disminuye las oportunidades de transmisión del virus.
4) Reporte de aves enfermas o muertas. Si se encuentra con aves, tanto silvestres como domésticas, en estado de enfermedad o fallecimiento, es fundamental comunicarse de inmediato con las autoridades del SENASA (Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria).
Para aquellos interesados en aprender más les recomendamos:
1) Podcast: Monte: supermercado y farmacia de los loros barranqueros
Acceso libre: https://ar.radiocut.fm/audiocut/alejandro-balbiano-columna-divulgacion-cientifica-en-radio-colonia-8805/
2) Trabajo de investigación científica (en inglés)
Masello JF, Martínez J, Calderón L, Wink M, Quillfeldt P, Sanz V, Theuerkauf J, Ortiz-Catedral L, Berkunsky I, Brunton D, Díaz Luque JA, Hauber ME, Ojeda V, Barnaud A, Casalins L, Jackson B, Mijares A, Rosales R, Seixas G, Serafini P, Silva-Iturriza A, Sipinski E, Vásquez R, Widmann P, Widmann I & S Merino (2018): Can the intake of anti-parasitic secondary metabolites explain the low prevalence of hemoparasites among wild Psittaciformes? Parasites & Vectors 11: art357
Acceso libre: https://link.springer.com/article/10.1186%2Fs13071-018-2940-3
Excelente texto! Gracias
ResponderBorrarNos alegra que te haya gustado. :-)
ResponderBorrarY aprovecho la oportunidad para recomendar, a los que se animen al inglés, otro trabajo científico nuestro relacionado con este tema:
Ortiz-Catedral, L.; Wallace, C.J.; Heinsohn, R.; Krebs, E.A.; Langmore, N.E.; Vukelic, D.; Bucher,
E.H.; Varsani, A.; Masello, J.F. (2022) A PCR-Based Retrospective Study for
Beak and Feather Disease Virus (BFDV) in Five Wild Populations of Parrots from Australia, Argentina and New Zealand. Diversity 14, art148.
Se puede acceder libremente en:
https://www.mdpi.com/1424-2818/14/2/148
Y se puede traducir, sin costo, con este software:
https://www.deepl.com/translator
Básicamente, lo que hemos descubierto en ese estudio es que los loros barranqueros, así como otras varias especies de loros, no tenían la Enfermedad del Pico y las Plumas de los Psittaciformes (PBFD), una enfermedad viral (virus BFD) que se pensaba que afecta a todos los loros del Viejo Mundo y de América. Nuestros resultados aportan más evidencia mostrando que enfermedades que se creen comunes en los loros, en realidad lo son principalmente de los loros en cautiverio (mascotas) y no lo son tanto de las poblaciones silvestres (en libertad). Una diferencia muy importante a tener en cuenta. Y una razón más para evitar tener loros en cautiverio.